Rubí de Bracamonte es una pequeña localidad de la provincia de Valladolid, en Castilla y León.
Patrimonio histórico: Uno de los lugares más destacados de Rubí de Bracamonte es su iglesia parroquial de San Miguel Arcángel, construida en el siglo XVI y con un impresionante retablo barroco. También puedes visitar la ermita del Humilladero, que data del siglo XVII.
Naturaleza: La localidad se encuentra en un entorno natural privilegiado, rodeada de campos de cereal y de la ribera del río Bajoz, donde se pueden dar agradables paseos.
Gastronomía: En Rubí de Bracamonte se pueden degustar platos típicos de la cocina castellana, como el lechazo asado, los guisos de cordero, el queso de oveja, los dulces de convento y el vino de la D.O. Cigales.
Fiestas: Las fiestas patronales se celebran en honor a San Miguel Arcángel, el 29 de septiembre, y en ellas se realizan diferentes actividades, como verbenas, procesiones y encierros.
Ven con tu pareja y amigos, podrás dormir en la bodega después de la cata, del menú en un restaurante y como broche final, visita al spa.
Visitas desde: 15€
Maridajes con queso y chocolate que te derretirán.
Visitas desde: 8€
Un lugar único donde el tiempo se para y la vida se siente, donde la historia trasciende y prevalece y donde la tradición y la cultura permanecen intactas.
Visitas desde: 60€
Presenta una de las eno-experiencias más originales de la zona: atardeceres de vino y jazz con alojamiento. Ideal para visitas románticas.
Visitas desde: 15€