Vino salamanquino, vino con tino.
- Aquí podemos encontrar 11 bodegas con turismo enológico.
- Hay 9 localidades con bodegas para visitar.
Salamanca, provincia por la que pasan la ruta del vino de Sierra de Francia, de Arribes y de Zamora, con once bodegas que ofrecen un turismo del vino al visitante digno de mencionar, y que están repartidas por diez localidades, dentro de las cuales, tenemos que destacar a San Esteban de la Sierra con dos bodegas que ofrecen enoturismo.
Hay en Salamanca bodegas de piedra preciosas, como por ejemplo la compañía de vinos La Zorra, la cual también es, a su vez, un ejemplo de enogastronomía de la zona.
Muy típicas de aquí son la uva Rufete y la Bruñal, con lo que no puedes dejar de probar vinos elaborados con estas variedades si quieres decir que has probado vino salamanquino. Además, en los vinos de la D.O. de Salamanca, el viñedo está normalmente distribuido en bancales, especialmente, los de uva rufete.
Para los fans de la naturaleza, el parque natural de Batuecas y el de Arribes del Duero podrán satisfacer su necesidad de paz espiritual.
Y atención para los más románticos, porque en la localidad de Topas se encuentra la Posada Real Castillo Buen Amor, un enoturismo 5 estrellas, más que recomendable, sobre todo en verano, porque no solamente puedes dormir en el castillo, lo que ya es de por sí una flipada, sino que también hay piscina para bañarse, y buena gastronomía. Realmente puede decirse que es un muy buen plan, sobretodo, para enoescapadas románticas o planes de fin de semana.
Si estás visitando la zona y te preguntas qué comer en Salamanca, pues no tienes más que buscar este plato, se llama chanfaina, y es un arroz con sangre, cordero y callos. Nada vegano, es cierto, pero es un plato muy conectado a la Salamanca profunda. De postre, perrunillas y bollo maimón o de clavonía, que ya solo por el nombre, da curiosidad saber cómo sabe.