Cuando vengas a visitar la ruta del vino de Lérida o Lleida, lo primero que hay que saber es que en ella degustarás vinos pertenecientes a la denominación de origen Costers del Segre. Los estudiosos del vino de esta zona han mencionado que ya en la edad de Bronce, sobre el 1400 a.c., había vides en Lleida, ya que se han encontrado semillas de uva carbonizada. También es cierto que esto no significa que ya en esta época se usaran estas semillas para crear vino. Lo que sí se sabe a ciencia cierta es que durante el Imperio Romano ya se hacía vino en este área de Cataluña, puesto que hay restos arqueológicos como prensas de vino y ánforas que así lo atestiguan. A la caída del imperio, fueron los monjes de los monasterios los que tomaron el timón de la producción de vino en Lérida, El monasterio de Poblet es bien conocido por realizar esta labor. Además, a partir del siglo XIII, comienzan a legislarse sobre el vino, y se regula el sistema de vendimia y se protegen los vinos locales. Es en este sentido, Lleida una de las provincias más avanzadas. A partir de aquí, el vino de Costers del Segre ha venido sufriendo altos y bajos. Por una parte, a partir del siglo XIV tiene que empezar a competir con otros cultivos también muy importantes en la península, como es el cereal o el olivo, por otra parte, se ha visto afectada por acontecimientos como la peste negra o ya más reciente, la filoxera del siglo XIX, que como en otras zonas, marcó un antes y un después en el viñedo catalán. La plaga llega en 1895 y no es hasta 1914, con Manuel Raventós (Codorniú) que no se recupera la esperanza en un futuro prometedor para los vinos de esta ruta.
Es importante saber que esta denominación de origen se caracteriza, frente a otras de la península, en ofrecer bastante libertad tanto en el uso de variedades de uvas como en la forma de combinarlas. El resultado de esto es la extensa gama de productos que ofrece esta denominación y que podrás comprobar por ti mismo, ánimate y ven a visitarla.
Visitas desde: 15€
Ver bodegaVisitas desde: 6€
Ver bodegaBodega restaurante Castell del Remei
FInca con restaurante en un castillo del siglo XIX con la bodega de finos con más antigüedad de Cataluña.
Castell del Remei es una bodega centenaria ubicada en una finca histórica de la Denominación de Origen Costers del Segre, donde los primeros vestigios de actividad vinícola se remontan al año 1780.
Es la bodega más antigua de Cataluña en la elaboración y etiquetaje de vinos finos de crianza, y también la primera bodega catalana construida según el modelo tipo bordelés de château rodeado de viñedos.
Se nutre de las uvas procedentes de la finca y de parcelas de viñedos de montaña de la propiedad. Está dirigida por su propietario, el vitivinicultor Tomàs Cusiné, reconocido enólogo y considerado uno de los mejores ensambladores de vinos del pais.
Visitas desde: 2€
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Entre viñedos, el tiempo se detiene para aprender y disfrutar.
La bodega está dotada con unas instalaciones de la más alta tecnología, que permite trabajar cada partida de uva de manera individualizada, obteniendo así el mejor de cada vino.
La sala de barricas fue construida bajo tierra para respetar su integración en el paisaje y aislarla mejor de las temperaturas de la zona. En ella reposan barricas de 300 litros, en su mayoría de roble francés, de diferentes tonelerías, orígenes y tostados. Esto nos permite poder elegir el perfil de crianza adecuado para cada tipo de vino.