Visitar Casas Altas-José Madeira Afonso

Vinos tienen la denominación de origen DOC Beira Interior.

HISTORIA DE LA BODEGA

Nacido en Coimbra, fue bautizado un mes después en Souropires. Aunque creció en Coimbra, pasaba los veranos en Souropires. Sus padres, originarios ambos de la Beira Alta (Sabugal y Souropires), tuvieron cinco hijos, siendo él el mayor y el único que desarrolló un apego especial por Souropires. Siempre existió una mayor conexión con Souropires, donde vivía su abuela materna, en una casa familiar que, según se cree, fue reconstruida a mediados del siglo XIX tras las invasiones francesas. Sus nietos representan, al menos, la octava generación que habita esa misma casa.

Estudió en la Escuela de Regentes Agrícolas (en Coimbra y Santarém), así como Medicina (en Coimbra y Lisboa). Vivió y ejerció la medicina durante dos años y medio en Noruega, y fue precisamente en Escandinavia donde despertó su interés por el mundo del vino, especialmente influenciado por amigos suecos.

Cuando su padre heredó las primeras viñas, él y su hermano João consideraron que sería una lástima cultivar la vid con dedicación solo para entregar las uvas a la cooperativa. Así, en 1994, produjo su primer vino tinto, elaborado con uvas de viñedos recientemente plantados y también de viñas viejas ubicadas en los Mortórios. De allí nació un clarete fresco, no del todo fácil de beber, pero que aún hoy se conserva en buen estado. En ese entonces, el vino se comercializaba bajo la marca "Rogenda".

Actualmente, sigue comprometido con una viticultura respetuosa y una elaboración de vinos con la mínima intervención posible.

TERRROIR

El paisaje de la Beira Interior es dramático y despoblado, con un clima exigente, suelos graníticos y altitudes elevadas. Las variaciones térmicas son intensas, con temperaturas negativas en invierno y veranos muy calurosos y secos. Nuestras parcelas se encuentran en la subregión de Pinhel y nuestros vinos tienen la denominación de origen DOC Beira Interior. A partir de las uvas de este terruño, busco crear vinos que representen fielmente lo mejor de la región. Por eso doy prioridad a las variedades autóctonas, como la Fonte Cal, la Siria, el Rufete, la Baga, la Touriga Nacional, entre otras, ya que son las que mejor se han adaptado a las particularidades del entorno. Sin embargo, este terruño también me ha permitido explorar creativamente la adaptación de otras variedades, algunas de ellas internacionales. Variedades como el Chardonnay o el Riesling han logrado sorprender por la expresión única que han mostrado en este terruño, que también es único en sí mismo.