La provincia de Murcia es un destino enoturístico en auge, donde el vino y la gastronomía se combinan para ofrecer experiencias únicas. Cuenta con tres denominaciones de origen: Bullas, Jumilla y Yecla, cada una con características propias que reflejan la tradición vinícola de la región. La uva Monastrell es la protagonista en estas tierras, dando lugar a tintos potentes, estructurados y con una gran expresión del terroir mediterráneo.
En Bullas, los viñedos situados en altitudes elevadas producen vinos frescos y equilibrados. Jumilla es la denominación más reconocida internacionalmente, con vinos intensos y aromáticos, ideales para el envejecimiento. Yecla, por su parte, ofrece una combinación de tradición e innovación, con bodegas que elaboran vinos modernos sin perder la esencia de la Monastrell.
El enoturismo en Murcia incluye visitas a bodegas, catas dirigidas y rutas del vino, donde se pueden recorrer paisajes de viñedos, conocer la historia vinícola y disfrutar de la hospitalidad de la región.
La gastronomía murciana complementa a la perfección estos vinos. Platos como el arroz con conejo y caracoles, el zarangollo (revuelto de calabacín, cebolla y huevo) o el pastel de carne son algunas de las especialidades que realzan los sabores del vino local. Además, los embutidos, como la morcilla y el chorizo, junto con los quesos artesanales, ofrecen maridajes perfectos.
Las tabernas y restaurantes de la provincia combinan cocina tradicional con propuestas innovadoras, permitiendo a los visitantes disfrutar de una experiencia gastronómica completa. En definitiva, Murcia es un destino ideal para los amantes del vino y la buena mesa, donde la calidad de sus productos y la autenticidad de su cocina hacen de cada visita un placer inolvidable.
Bodega Madrid Romero

BSI Bodegas San Isidro

Bodegas Viña Elena

Bodegas Barahonda
