Si visitas Cataluña entre noviembre y abril, no puedes perderte una de sus tradiciones gastronómicas más queridas: la calçotada. Esta fiesta popular gira en torno al calçot, una cebolla tierna y alargada, que se asa a la llama viva hasta quedar bien tostada por fuera y tierna por dentro. Se sirve con la deliciosa salsa romesco o salvitxada, elaborada con tomates, ñoras, almendras, ajo y aceite de oliva.
Las calçotadas no son solo una comida, ¡son una experiencia! Se celebran en reuniones al aire libre o en masías y bodegas tradicionales, donde podrás disfrutar de un ambiente festivo, familiar y muy auténtico. El ritual incluye ponerse babero, mancharse las manos pelando calçots y compartir risas en torno a la brasa. Después de los calçots, suele seguir un segundo plato a base de carne a la brasa, acompañada de pan con tomate y vino de la región.
En Sant Sadurní d’Anoia y sus alrededores, muchas bodegas ofrecen menús especiales para calçotadas, ideales para combinar con visitas a cavas y catas de vinos. Una opción perfecta para pasar un día diferente en el corazón del Penedès.
📅 Recuerda: la temporada de calçots va de noviembre a abril, ¡así que todavía estás a tiempo de disfrutarla!
¿Te animas a vivir una calçotada? Escríbenos y te ayudamos a organizarla. 😊
Bodegas donde comer una buena calçotada
